¿Qué pasó con el hijo de Pedro Martínez?
Pedro Pablo ya no está en béisbol, fue dejado libre en el 2022. Estudia administración y piensa regresar a la industria pronto.
Al momento de negociar con los Tigres de Detroit en el 2017, su padre, Pedro Martínez, puso de principal importancia que su hijo terminara sus estudios. En esa ocasión, cursaba el bachillerato.
JORGE LUIS TORRES
Santo Domingo
Ser hijo de un Grandes Ligas no garantiza que el camino al éxito esté llano, al menos en el béisbol.
Se pueden citar algunos casos de descendientes de peloteros que se han establecido en Las Mayores. Moisés Alou, Vladimir Guerrero Jr., Fernando Tatis Jr., así como Jeremy Peña, son de los más sonoros, pero, no todos tienen el mismo resultado.
Pedro Pablo Martínez, hijo del miembro del Salón de la Fama de Cooperstown Pedro Martínez, es un caso aislado a los que ya mencionados. Martínez Jr. fue proyectado como un posible estelar en el negocio de la pelota.
Pedro Pablo firmó como tercera base con los Tigres de Detroit en el 2017 por un monto de 750 mil dólares, más un bono estudiantil. También jugó algunos partidos en la inicial.
Tres años después, la organización decidió dejarlo libre a inicios de los entrenamientos de primavera del 2022. Al momento de la decisión, cuando jugaba en la liga de novatos, mejor conocida como “Rookie League” acumuló un promedio de .168 con 543 de OPS, 1 jonrón, 15 carreras remolcadas, ocho boletos, 12 carreras anotadas y 17 hits.
Junto a Martínez, los Tigres también dieron de baja al torpedero Daniel Pinero.
En toda su carrera como profesional, en esos tres años de acción, registró discretos porcentajes de .206/.309/.311/.619 con solamente cuatro jonrones y 50 carreras remolcadas en 114 juegos.
Poco después de ese suceso, Pedro Pablo decidió emular a su padre e intentar establecerse como lanzador. Aparentemente, el joven de 23 años no llamó la atención de ningún equipo.
¿QUÉ HACE AHORA?
Pedro Pablo intenta abrirse camino en el mundo de los negocios. Inició la carrera de administración de empresas en Barna Management School. Cursa su primer semestre.
Martínez Jr. manifestó que dejar la pelota fue una decisión muy difícil, que le tomó dos años aceptarla.
“Como tú sabes el béisbol no espera a nadie. No fue fácil para mí y mi familia alejarme del terreno. Lo superé gracias al apoyo de mis padres”, manifestó el hijo del miembro del Salón de la Fama de Cooperstown, Pedro Martínez, en una conversación con este diario.
Afirmó que su padre lo apoyó desde el principio, en especial en el momento que los Tigres lo dejaron en libertad.
Añadió que no se sentía cómodo como lanzador, y que por eso no continuó en ese ejercicio.
“Sentí que no era lo mío. Ya no quería seguir en eso verdaderamente”, mantuvo.
SEGUIRÁ EN PELOTA
El joven de 23 años no descarta volver a los campos de béisbol, pero en otro rol.
Ya luego de terminar su carrera como administrador de empresas, Martínez Jr. pretende darse otra oportunidad, pero no como jugador.
“Ciertamente es lo que sé hacer. Hablo los dos idiomas, y fue lo que aprendí en mi casa. Yo veía a papi (Pedro Martínez) jugando béisbol, e incluso luego que terminó, sigue en eso”, adujo Pedro Pablo.
Martínez Jr. dijo que su padre fue el que le dio la idea de volver al béisbol luego de terminar la universidad. Según “Pepo”, como lo llaman en sus familiares, su padre le aseguró tiene capacidad para liderar un equipo. Pedro Martínez labora para los Medias Rojas como asesor especial.
“Él fue quien me compartió la idea. Me dijo que ya luego de terminar mi carrera me inicie en el negocio de la pelota, que doy para eso, y me quiero dar la oportunidad”, expresó.
Explicó que para él no sería difícil ya que maneja los dos idiomas y tiene amplio conocimiento de béisbol.
Aseguró que toda su familia le apoya en sus decisiones, aunque éstas no estén mezcladas con la pelota.
“Una de las cosas más importantes es saber hablar inglés y gracias a Dios y a mis padres yo lo hablo fluido. Sé que tengo que aprender mucho pero me quisiera trabajar en las oficinas en un futuro”, destacó.
Pedro Pablo Martínez jugó un año en el país luego de firmar en la afamada liga de verano. Poco después, partió a los Estados Unidos para jugar en el torneo de novatos (Rookie League), donde duró tres años.