También lo despojan de la seguridad que le corresponde por ley
El exjefe de la Policía Nacional atribuyó el retiro de sus escoltas al trabajo que realiza para la candidatura presidencial del doctor Leonel Fernández, líder de la Fuerza del Pueblo.
El exjefe de la Policía Nacional, mayor general Pedro de Jesús Candelier, informó anoche que fue despojado de los escoltas que tiene asignados por ley y responsabilizó al presidente Luis Abinader de esa decisión, la que atribuye a que trabaja para llevar al doctor Leonel Fernández de nuevo al poder.
En un mensaje en un video colgado en las redes, Candelier afirma que “Abinader está desenfocado totalmente de lo que debe hacer” y en cambio “utiliza todas las instituciones del Estado con los recursos, violando las leyes en apuro de buscar una reelección que no merece porque no ha hecho absolutamente nada”.
El oficial del Ejército que comandó la Policía Nacional y la Autoridad Metropolitana del Transporte (AMET) agregó que el presidente Abinader “ahora recae también sobre mí, me quita la seguridad que tengo, que por ley me corresponde”.
“Si algo me pasa”, apuntó Candelier, “de ahora en adelante, señor Presidente, el pueblo se lo cobrará a usted”, porque a su juicio, “todo eso obedece, simple y llanamente, porque estoy trabajando con el único líder que tiene el país, que se llama Leonel Fernández Reyna, y que será el próximo Presidente de la República”.
Antes de ser jefe de la Policía, Candelier ganó notoriedad pública como coronel del Ejército Nacional a comienzos de los años noventa, cuando el presidente Joaquín Balaguer lo nombró jefe de la Dirección General Forestal, destacándose por enfrentar con mano dura la devastación de los bosques en gran parte del país.
Como jefe de AMET durante el gobierno de Leonel Fernández, Candelier impuso su mano fuerte para castigar las violaciones del tránsito tanto en la capital como en las demás ciudades del país.
Con el retiro de la escolta a Candelier suman dos, hasta el momento, los exjefes de Policía a los que se deja sin la seguridad que por ley les corresponde. El primero fue el general Guzmán Fermín.