Excesos, accidentes e intoxicaciones marcan el azueto de Nochebuena y Navidad

Excesos, accidentes e intoxicaciones marcan el azueto de Nochebuena y Navidad
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Autoridades reportan múltiples casos que involucran a hombres, mujeres y niños tras las celebraciones

Por Alan Vargas de Samantha Radio Online, 25 dic 2025

Las festividades de Nochebuena y Navidad, que tradicionalmente representan unión familiar y alegría, dejaron también un saldo preocupante de excesos, accidentes e intoxicaciones en distintos puntos del país. Los reportes oficiales y hospitalarios reflejan que el consumo desmedido de alcohol y la imprudencia en las calles se convirtieron en protagonistas indeseados de la celebración.

Los centros de salud informaron un incremento significativo en las atenciones médicas relacionadas con intoxicaciones alcohólicas, especialmente en adultos jóvenes, pero también en adolescentes y mujeres que participaron en reuniones familiares y actividades sociales. En varios casos, se trató de personas que nunca habían consumido alcohol en exceso y que sufrieron mareos, vómitos y pérdida de conciencia.

Las emergencias hospitalarias también recibieron a niños intoxicados accidentalmente, tras ingerir bebidas alcohólicas sin supervisión adecuada. Estos casos encendieron las alarmas sobre la necesidad de reforzar la vigilancia en los hogares durante las celebraciones, evitando que los menores tengan acceso a botellas y vasos descuidados.

En las calles, la combinación de alcohol y conducción imprudente provocó accidentes de tránsito que dejaron heridos y víctimas mortales. Las autoridades de la Dirección General de Tránsito y Transporte Terrestre (DIGESETT) reportaron choques múltiples y motociclistas lesionados, muchos de ellos sin casco protector y bajo los efectos del alcohol.

Las mujeres también figuran entre las víctimas de intoxicaciones y accidentes. En varios hospitales se atendieron casos de violencia doméstica y riñas ocurridas durante las celebraciones, donde el consumo de alcohol fue un detonante. Estos hechos reflejan cómo los excesos pueden transformar una fiesta en tragedia.

El Ministerio de Salud Pública reiteró que el alcohol adulterado sigue siendo un riesgo latente en estas fechas. Se confirmaron casos de intoxicación grave por consumo de bebidas ilegales, lo que obligó a reforzar las campañas de prevención y a recordar a la población que solo debe adquirir productos en establecimientos autorizados.

Las autoridades policiales y de emergencia destacaron que el Sistema 911 recibió cientos de llamadas relacionadas con intoxicaciones, accidentes y riñas durante la Nochebuena y el día de Navidad. La rápida respuesta permitió salvar vidas, pero también evidenció la magnitud del problema.

Organizaciones sociales y comunitarias han levantado la voz para exigir mayor responsabilidad de los adultos en el cuidado de los niños y adolescentes. La prevención, señalan, no depende únicamente de las autoridades, sino de la conciencia ciudadana y del compromiso familiar.

Los reportes también reflejan que muchos de los afectados necesitaron hospitalización prolongada, lo que genera un impacto adicional en el sistema de salud. Los médicos insisten en que la intoxicación alcohólica no es un asunto menor y puede dejar secuelas permanentes en el organismo.

La Policía Nacional informó que se realizaron operativos preventivos en distintas provincias, con retenes y patrullajes para reducir los accidentes de tránsito. Sin embargo, reconoció que la imprudencia y el consumo excesivo de alcohol siguen siendo factores difíciles de controlar en estas fechas.

El balance general de las celebraciones muestra que, aunque la mayoría de las familias disfrutaron con responsabilidad, los excesos de una parte de la población dejaron un saldo de dolor y preocupación. La Navidad, que debería ser sinónimo de paz y unión, se vio empañada por conductas que pudieron evitarse.

En conclusión, los últimos reportes de Nochebuena y Navidad son un llamado urgente a la reflexión. La sociedad necesita asumir que la prevención, la moderación y el cuidado de los más vulnerables son esenciales para que las fiestas se vivan con alegría y sin tragedias.

samantharadio

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